Yo me plantee el arte como la búsqueda de la belleza hace algún tiempo atrás. Pero parece ser que cada quien puede hacer su propia interpretación de que es belleza, por lo que tener una definición abstracta del arte no simplifica nada: es dependiente de otro concepto, por lo que hay que definir primero que es la belleza.
No que es bello para cada quien, sino que es la belleza en sí. Y hay quienes te dirán que las mujeres, que los atardeceres, que la música, que tal música, que los anocheceres, que los hombres, que los cadáveres, que los cachorros, que los gatos. Pero eso no deja de ser que le parece bello a la persona consultada en lugar de ser que es la belleza.
Se puede sacar en limpio que la belleza es todo aquello que el sujeto encuentre agradable a los sentidos. Pero aquí es que uno cae en la cuenta de que todos vemos diferentes cosas como bellas, muchas veces chocando con las definiciones de otras personas. Muchos encuentran bello justamente aquello que nadie más sabe apreciar, ven bello aquello que les despierte repulsión. Hay que encontrar una manera de abstraer la belleza del sujeto para poder definirla per se.
Aquí mi mente vino a digerir la idea de que hay artes imaginativas y artes representativas. O más bien, que hay dos enfoques hacia el arte: aquel que idea como debe ser la belleza, y aquel que se centra en plasmar esa idea.
Así, por ejemplo, un compositor es imaginativo, mientras que el interprete es representativo. Hay cantautores, que entrarían en ambos lugares, como el pintor que idea la pintura y la plasma. Pero está el pintor que solo plasma un paisaje que encuentra admirable, y está el caricaturista que no tiene tanto talento para dibujar, pero tiene tanto que decir... El escritor siempre describe la idea, es imaginativo puro. El bailarín solo puede mostrarla, es representativo puro.
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| Triángulo de Penrose |
Pero esto no resuelve nada, no define sino que cataloga...
"Du Levande".
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