martes, 8 de mayo de 2012

Elite

Han habido muchas personas a lo largo de la historia que han apelado al inconmensurable poder de las masas. Yo no apelo al poder de la mayoría, sino que apelo al que unos pocos disponen: el poder de los mejores.
Soy un elitista y solo quiero a mi lado a aquellos que se lo merezcan. ¿Qué me importa lo que opinen de mi? ¿Qué me importa si solo unos pocos me escuchan? Mientras esos pocos sean lo mejor de su estirpe, no necesito de nadie más.
Yo no busco semejantes. Los que se refugian en el número buscan más de su tipo, iguales, otros como ellos. Pero yo busco compañeros que me complementen. Mi función puedo cumplirla yo mismo, lo que necesito es aliados que hagan lo que yo no puedo... O no quiero. Crear un equipo élite, donde cada uno sea el mejor en su área. ¿Tendremos disputas internas? ¡Por supuesto! Es lo que le da sabor a la vida. Pero seremos funcionales.
El único problema radica en depositar mi confianza en otra gente, por eso es que tengo que ser muy selectivo aún si lo que busco es un bruto sin cerebro, porque tiene que ser el mejor.

1 comentario: